Arroz con leche con caramelo crujiente

Si pensamos en postres clásicos, éste es uno de los que se nos viene a la cabeza verdad? Bueno este junto las natillas y el flan claro 😉 Todos conocemos sobradamente esta receta, aunque en cuanto a proporciones y tiempos, hay grandes variaciones. Hay recetas que requieren estar más de dos horas cuchara en mano, y otras que para nuestro gusto son demasiado rápidas.Esta receta en concreto está en un punto intermedio, así que se ha convertido en la receta de arroz con leche perfecta!! Queda un postre muy cremoso que merece la pena que probéis. Si encima tenéis una panificadora todo será coser y cantar ya que no tenéis que estar pendientes de remover. Aun así os explicamos cómo hacerlo de las dos maneras para que podáis elegir vuestra mejor opción.

Os encanta este postre como a nosotras? Vamos a ponernos manos a la obra!!

Arroz con leche con caramelo crujiente (manual o panificadora)

Preparación: 50′ manual / 1h 20′ en panificadora
  Raciones: —
Dificultad: media

Ingredientes

  • 1 litro de leche entera
  • 100 ml de nata (opcional, sino sustituir por más leche)
  • 120 gr arroz bomba
  • 120 gr azúcar
  • 2 ramas de canela
  • la piel de 1 limón
  • una pizca de sal
  • azúcar para caramelizar

Receta

Empezaremos con el modo tradicional. En una cazuela pondremos la leche, la nata, las ramas de canela, la piel del limón y una pizca de sal. La piel procuraremos que no tenga la parte blanca del limón, ya que amarga. Ponemos a calentar, y cuando veamos que llega a ebullición bajamos el fuego, cocemos a fuego lento durante 5′. De esta forma la leche tomará el sabor de la canela y el limón.

Es el momento de incorporar el arroz. A fuego medio-bajo estaremos removiendo constantemente durante unos 40′, que será el tiempo que tarde el arroz en hacerse. Es  importante no dejar de remover porque se nos puede pegar. Cuando nos queden unos 5 minutos para acabar quitamos la piel del limón y las ramas de canela. Por último añadimos el azúcar y mezclamos bien durante esos últimos 5′. Vertemos sobre el recipiente que hayamos elegido y dejamos enfriar a temperatura ambiente. Para que no salga costra en la superficie hay que taparlo «a piel» con film , esto quiere decir que el film debe estar tocando la superficie del postre. Después dejaremos en la nevera para que enfríe del todo antes de servir.

Si tenemos panificadora lo haremos de la siguiente manera. En la cubeta ponemos todos los ingredientes excepto el azúcar, que como en la forma tradicional pondremos al final. Elegimos el programa «mermelada» de la panificadora, que en mi caso es el número 11. Este programa tiene una duración de 1h 20′. Primero calentará los ingredientes y después, además de calentar, moverá las palas. Por lo tanto ya nos podemos olvidar de nuestro futuro arroz con leche durante un rato. Media hora antes de que finalice el programa sacaremos las ramas de canela y la piel de limón, e incorporaremos el azúcar. Una vez el programa acaba nos avisará con un pitido. Volcamos en un recipiente y dejamos enfriar.

Si queremos hacer el caramelo crujiente tenemos que tener soplete. Lo haremos cuando  el arroz esté completamente frío y justo en el momento de servir. Ponemos azúcar generosamente sobre toda la superficie del arroz con leche, y con el soplete lo quemamos. Cuando el azúcar se enfría se endurecerá. Servir inmediatamente.

 

Sugerencias y consejos:

A la hora de caramelizar es importante hacerlo al momento. Una vez leí que si el arroz con leche está completamente frío a la hora de quemar el azúcar, el crujiente de caramelo se mantendría durante unas horas después. Probé a hacerlo, a cuando  lo volví a sacar de la nevera ya no había crujiente…

He utilizado moldes individuales por la cosa de hacer el crujiente de caramelo justo al servir. Si vais a hacerlo así reducir un poco la cantidad de azúcar del arroz con leche para que no sea tan empalagoso. Si por el contrario vais a usar una fuente grande podéis dejarlo tal cual.

El arroz tiene que ser el redondo, que es el que mejor absorbe. Nunca usar los de grano largo y mucho menos vaporizados.

Con la panificadora no hace falta infusionar primero la leche con la canela y el limón. Al estar trabajando en total 1h y 20 la leche tendrá tiempo suficiente para coger sabor.

Un soplete no es algo que habitualmente tengamos en casa.  Decidimos comprarlo porque da mucho juego en la cocina. Nos costó 14 euros, por si os animáis. Y si no sin caramelizar bien bueno está también;)

Thanks!

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